Desde esta soledad tan mía, te escribo.
Esta soledad extraña
donde no cabe nada, más allá de esa mirada,
donde el sol se recuesta sobre mi espalda cansada
para abrazar mi vestido de huesos y lágrimas
y a veces me acuna hasta que llega el alba
y dormita conmigo susurrándome en la almohada.
Desde esta soledad callada, te escribo,
para contarte que aún vuelan en mis labios las palabras,
que la noche te busca con la luna en la ventana
para asomarse al recuerdo de aquel otoño en que llegabas.
Desde esta soledad quebrada, me miro
y levanto la costra de la herida desangrada,
como un río desbordado sobre la tierra mojada,
que se empapa de tristeza antes de volcar su pena
sobre las aguas saladas.
Te escribo desde el silencio, este silencio que mata,
al tiempo que late y vive en lo profundo del alma.
Este silencio que grita. Este silencio que calla.
Este silencio que habita en esta soledad
que solo busca ser calma.
Madre mía...
ResponderEliminarTe quiero mucho amiga, si sientes mi abrazo, es suficiente.
Y se lee esa soledad tan tuya.. que la sentirla.. se comprende la esencia de tus letras..
ResponderEliminarHermoso..
Un abrazo
Saludos fraternos...
Querida Angela, tus letras están llenas de soledades, pero recuerda que también derrochan vida y la vida ... sigue.
ResponderEliminarTu silencio grita, pero pronto entonará una linda melodía, porque la belleza de tu alma se encargará de componerla.
Te dejo un infinito abrazo y al igual que mi herma cubana, espero que lo sientas.
¡Fuerza, te quiero amiga-vecina!
Cierto que el silencio mata y la soledad duele tanto como esa costra levantada... Expresas las emociones, como quien habla desde la misma herida.
ResponderEliminarY si acaso fuera real la intención...te mando mis abrazos grandes para darte fuerzas y hacerte mirar al frente y arriba de nuevo.
Mira que tus letras nos acompañan unas buenas horas de nuestra vida.
Muchas bendiciones, amiga.
Angela, se extrañaban tus poesias.
ResponderEliminarTriste la que nos compartes hoy, con una herida a flor de piel, que calla, que grita y que sangra en esa soledad que nombras.
Un abrazo fuerte amiga.
Magnifica poesía. Quizás estás encontrando en esa soledad, esa que a veces tanto mata y ahoga, lo más bello de ti, y es que el silencio siempre nos habla.
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