Nazco de ti
Florezco en la humedad de tus párpados
mientras siento que la vida me respira
y me va dibujando.
Nazco del fuego
de la brisa
del deseo que se mece
entre la piel de tus manos
de ti
nazco de ti
que puedes ver el hambre de mis labios
abrir mis jaulas
y darle forma a todos mis lunares
mientras me vas deshojando.
De ti
que susurras mi nombre
y detienes el viento
en las huellas dactilares
de tus ojos descalzos.
Nazco de ti
cuando estas cerca
y me vas desnudando...
Neruda dijo: "Para nacer he nacido", y qué hermoso nacimiento éste que nos traes tú, lleno de entrega pasional.
ResponderEliminarAbrazos y felicidades.
Cada día, de alguna forma, tenemos la posibilidad de nacer a algo nuevo... Gracias Maritza. Un beso grande
EliminarPreciosos versos los que nos dejas Ángela. Parece el renacer de una nueva primavera.
ResponderEliminarUn abrazo en la noche.
Gracias Rafael. Un beso grande
EliminarQué hermosos, qué sencillos, qué difícil escribir con esa naturalidad que tú lo haces. Nacer en ti despierta los sueños. Un abrazo, Ángela.
ResponderEliminarDespertar a los sueños, siempre es hermoso Alfredo. Gracias por hacerlo entre mis letras. Un beso grande
EliminarCasi se te puede escuchar...
ResponderEliminarBesos, Ángela...
A veces, esos "casi" pueden convertirse en susurros... Gracias Hacedor de Sentires. Un beso
EliminarUn poema que nace del amor. Precioso
ResponderEliminarEnhorabuena
Gracias por pasar, María del Mar. Estás en tu casa. Un abrazo
EliminarEsta es la verdadera diferencia entre pornografía y ortografía. Con tu seducción me han entrado ganas de agarrar un cortacésped (y que tiemblen todas las primaverales flores que habremos de acuchillar con nuestras ansias).
ResponderEliminarEs tal el hacerse uno mismo que parece como si tuviéramos la capacidad de nacerle (al otro) o nacer de nuestro amante. Muy buen poema, Ángela. Enhorabuena.
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