Tal vez mañana sea libre y no
me encadene el recuerdo.
Tal vez no lloren mis labios
por no contener tus besos.
Tal vez el viento se calle
y tu nombre se torne silencio
y pueda por fin olvidarte
¡y escuchar mi voz de nuevo!
Tal vez mañana sea libre de
esta cárcel de deseo.
Tal vez no incites mi carne
con un simple pensamiento.
Tal vez las sombras se
enciendan
latiendo sobre mi pecho
y en mi piel crezcan las albas
amaneciendo en mi cuerpo.
Mañana, tal vez, mañana.
Hoy tan solo soy hambre ¡hambre de ti y de tu
fuego!
Hoy quiero morder tu boca y beber
de tu recuerdo.
Hoy mi piel arde en tu carne
cabalgando contra el viento.
No. Hoy no quiero olvidarte…o
tal vez quiero y ya no puedo.
Mañana… tal vez mañana,
aprenda a vivir sin ti…
¡sin sentir que estoy muriendo!
Como siempre tus letras son pasión que desbordas por los cuatro costados, y como siempre de tejo todo mi cariño y mi abrazo, nunca olvides madrileña querida que aunque no me veas, estoy.
ResponderEliminarAchuchones de esos...