Te pido perdón
por cada silencio, por cada duda,
por cada mirada impregnada del color
de una lágrima exenta de cordura.
Te pido perdón
por las noches vacías,
por los cielos sin luna,
por tantas albas rotas
entre soledades y brumas.
Por las palabras calladas
en medio del olvido,
mientras las farolas caídas
apagaban el camino…
Te pido perdón
por sentirme tan tuya
y querer respirarte
como si fueses mío.
Por necesitar tus manos
en mi rostro dormido
y querer sentir tus labios
en el sabor de los míos.
Por perderme en esta senda
de piedras y de espinos,
de oscuridades eternas
que me están nublando el juicio.
No te pido perdón por lo que soy
ni te pido perdón
por lo que nunca he sido….
nunca fui marioneta
ni costura a doble hilo.
Nunca fui una muñeca,
de trapos ajenos y bonitos vestidos.
Soy mujer de entraña y tierra, de mar y barro
de blancos lirios,
soy una mujer de luz y llanto
de amor y carne, de fuego anochecido.
Soy humana
y sé que mis pasos han errado
sé que mis manos te han herido
y ahora siento en el alma esta derrota,
que me quiebra al pensar que te he perdido.
Pero tú también te has perdido, amor,
diseminado entre las sombras,
a la deriva del frío,
donde marchitan las rosas
en los escombros vividos.
Tú también te has perdido, amor,
te estás perdiendo a ti mismo
y no,
no quiero que pidas perdón
¡encuéntrate y vuelve conmigo!
A veces es bueno perderse, para volverse a encontrar con los sentimientos reforzados.
ResponderEliminarAmbos se pierden,sin duda.
ResponderEliminarPero el perdón es la máxima en la restauración.
Bellísima forma de escribir, siempre con el sentimiento intenso, Ángela.
Me gustó mucho.
Besos y un abrazo para tu día.
Madre mía, me dejas sin palabras, JODERRRRRR.
ResponderEliminarBesucos, amiga querida
Hola Ángela, una preciosidad tus poemas y tu blog. Te sigo! Gracias por acompañarme en Talitá Kum!Un abrazo
ResponderEliminarAngela, llegué a vos desde otro blog amigo. Tu sitio es ¡estupendo! y éste poema, sencillamente una maravilla.
ResponderEliminarTe sigo desde hoy, y te invito a conocer los míos.
Un abrazo desde Buenos Aires
Increíble este poema de ahora. Me gustó por la transmisión de sentimientos hondos, profundos que se adivina a lo largo de sus letras.
ResponderEliminarUn gran poema de amor con mayúsculas.
Gracias por tu comentario. Te añadí como favorita y te visitaré cuando actualices. Te sigo.
Saludos
Marikosan, no sé si es bueno o no, pero es cierto, todos perdemos un poco de nosotros mismos a lo largo del camino...
ResponderEliminarGracias por estar en mi rincón. Te dejo un abrazo y una sonrisa iluminada por un pequeño rayo de sol
Maritza..me gusta leer tus comentarios, me saben a pasión y a templanza. Gracias por regalarme tu tiempo. Un beso grande para ti.
ResponderEliminarMayra ¡¡¡esos besucos!! jajajaja Ya los echaba yo de menos :)
ResponderEliminarQue tengas un lindo día mi niña.
Maria R., tienes un hermoso rincón y ya he anotado esa película que descubrí ayer paseando por allí "El último bailarín de Mao"... Ya te contaré cuando la vea.
ResponderEliminarGracias por quedarte por aquí. Te dejo un fuerte abrazo.
Susana, no dudes que pasaré a visitarte. Gracias por tus hermosas palabras. Te dejo un fuerte abrazo
ResponderEliminarLuis, una de las cosas hermosas de esta cuasi infinita red, es que puedes encontrar rincones llenos de belleza donde menos te lo esperas. El tuyo lo es.
ResponderEliminarGracias por estar aquí y por decidir quedarte.
Un fuerte abrazo para ti.