Tengo una flor en el pecho
que late despacio susurrando versos.
Tengo una flor que florece
bajo el tierno abrigo de tus ojos bellos.
Tengo una flor encendida
de caricias dulces, de sueños y anhelos.
Tengo una flor que te llama,
escribe tu nombre con la miel de sus pétalos
Tengo una flor que tirita
buscando tus manos en la noche fría
añora, la piel de tus dedos,
tu boca que esconde mil promesas tibias.
Tengo una flor que palpita
buscando en tu cuerpo praderas de vida.
Tengo una flor que marchita,
si al llegar la noche no escucha tu risa.
Tengo una flor para darte,
¡una brizna de aire, de esencia, de brisa!
¡Un corazón para amarte
y un alma callada que por ti suspira!
Tus versos hacen que florezcan flores en el alma de todos los que te leemos..... nos trasmites amor y nos haces conscientes de todo el que tenemos para dar y del que recibimos.
ResponderEliminarAbrazos.
Tenés una flor de talento, otra de ternura, otra de dulzura, y la más importante, la calidez de tus poemas, por ende, de tu sensibilidad y personalidad.
ResponderEliminarBesos mi reina poetisa!!!